sábado, 13 de septiembre de 2008

Date por muerto

Finalmente entendió que su vida es frágil y finita.

La probabilidad de vivir cada día era pequeña.

Estaba en paz y justificaba sus actos pensando que cumplía con su deber y protegía a sus seres queridos. Lo confuso era que los "malos" también cumplían su deber y protegían a los suyos.

Cada segundo era un regalo... cada respiro, cada sonrisa...

Ojalá y pase pronto. Lo que sea, pero pronto...

domingo, 7 de septiembre de 2008

Y se fué...

Lo había imaginado mil y una veces.
Era un día tranquilo en el trabajo, había tiempo de pensar y lo volvió a imaginar.
Interrumpió su trabajo, miró a toda la gente ocupada dedicando también la mayor parte de su día a la operación de la empresa.
Cerró la computadora y se dirigió al estacionamiento.
Condujo a su casa, y llenó un par de mochilas con un poco de ropa y provisiones.
Se cambió, salió de la ciudad y tomó la carretera...
Hacia la playa... ahora es pescador...